Sobre la crisis policial en Salta, Gaspar Solá dijo que "no hay nada que opinar"

El ministro de Seguridad de Salta, Gaspar Solá Usandivaras, abordó en una entrevista con El Caudillo los recientes y trágicos acontecimientos que han conmocionado a la fuerza policial, incluyendo la muerte de dos efectivos en el norte de la provincia. A pesar de la gravedad de la situación, sus declaraciones generaron más preguntas que respuestas.

En respuesta a las inquietudes sobre estos casos, Usandivaras fue tajante: “Está en manos de la Fiscalía, no hay nada que opinar”. Mientras tanto, la policía salteña atraviesa uno de sus peores momentos en términos de desgaste humano, precariedad y abandono.

El ministro también destacó algunas iniciativas, como la firma de un convenio en junio para implementar talleres que busquen identificar a los “grupos vulnerables” dentro de la fuerza. No obstante, en la práctica, estos programas se limitan a lo simbólico: se llevan a cabo capacitaciones sin seguimiento efectivo, promesas que no se concretan en el terreno y un personal que continúa enfrentando turnos interminables, presiones jerárquicas y problemas de salud mental sin el apoyo necesario.

Respecto a la violencia de género en la institución, Usandivaras expresó su satisfacción por la transferencia de la oficina específica al Ministerio, alejándola de la Jefatura. Sin embargo, más allá de la “tranquilidad institucional” que él asegura, los casos de violencia siguen en aumento. Las víctimas, mujeres policías que se ven obligadas a denunciar a compañeros o superiores, no reciben respuestas rápidas ni la protección necesaria.